Hoy, te hablaré del cerebro femenino y cómo actúan y afectan las hormonas en su comportamiento, las cuales nos ayudan a guiar las conductas alimenticias, sociales, sexuales y agresivas.
Pueden influir en el gusto por la conversación, el flirteo, las fiestas (como anfitrión o invitado), la programación de citas, integrarse a los juegos infantiles, el envío de notas de agradecimiento, las caricias, la preocupación por no herir sentimientos ajenos, la competición, la masturbación y la iniciación sexual.
Recuerda que: mientras más nos conocemos, más nos entendemos y entendemos a los otros.
Partes del cerebro:
- Córtex cinculado anterior (CCA): sopesa las opciones, toma decisiones. Es el centro de las preocupaciones menores y es mayor en las mujeres que en los hombres.
- Córtex prefrontal (CPF): es la reina que gobierna las emociones y evita que se vuelvan desmedidas. Pone freno a la amígdala. Es mayor en las mujeres, y madura uno o dos años antes en las mujeres que en los hombres.
- Ínsula: centro que procesa los sentimientos viscerales. Mayor y más activa en las mujeres.
- Hipotálamo: director de la sinfonía hormonal; pone en marcha las gónadas (ovarios y testículos). Comienza a funcionar antes en las mujeres.
- Amígdala: la bestia salvaje que llevamos dentro; núcleo de los instintos, domada solamente por el CPF. Es mayor en los varones.
- Glándula pituitaria: produce las hormonas de la fertilidad, producción de leche y comportamiento de crianza. Ayuda a poner en marcha el cerebro maternal.
- Hipocampo: es el elefante que nunca olvida una pelea, un encuentro romántico, de ternura, ni deja que lo olvides tú. Es mayor y más activo en las mujeres.
Las hormonas y su comportamiento:
- Estrógeno: es el rey en el cuerpo femenino. Es potente, ejecutivo, arrollador; a veces totalmente utilitario, a veces seductor agresivo; amigo de la dopamina, la serotonina, la oxitocina, la acetilcolina y la norepinefrina (las sustancias químicas que hacen que el cerebro se sienta bien).
- Progesterona: permanece en segundo plano, pero es hermana poderosa del estrógeno; aparece intermitentemente y a veces es una nube tormentosa que cambia los efectos del estrógeno; otras veces es un agente estabilizador; madre de la alopregnenolona (el Valium del cerebro).
- Testosterona: también las mujeres la producen. Es rápida, enérgica, centrada, arrolladora, masculina, seductora, vigorosa, agresiva, insensible; no está para mimos.
- Oxitocina: esponjosa, parece un gatito ronroneante; mimosa, providente, como la Madre Tierra; el hada buena Glinda en El Mago de Oz; encuentra placer en ayudar y servir; hermana de Ja vasopresina (la hormona masculina socializante), hermana del estrógeno, amiga de la dopamina (otra sustancia química que hace sentir bien al cerebro).
- CORTISOL: crispado, abrumado, estresado; altamente sensible, física y emocionalmente.
- Vasopresina: sigilosa, en segundo plano, energías masculinas sutiles y agresivas; hermana de la testosterona, hermana de la oxitocina (hace que uno se conecte de modo activo, masculino, igual que la oxitocina).
- DHEA: reservorio de todas las hormonas; omnipresente, dominante, mantenedora de la neblina de la vida; energética; padre y madre de la testosterona y el estrógeno, apodada «la hormona madre», Zeus y Hera de las hormonas; fuertemente presente en la juventud, se reduce hasta la nada en la ancianidad.
- Androstenediona: madre de la testosterona en los ovarios; fuente de descaro; animada en la juventud, disminuye en la menopausia y muere con los ovarios.
- Alopregnenolona: la hija suntuosa, calmante y apaciguadora de la progesterona; sin ella nos sentimos irritables; es sedativa, calmante, tranquilizadora; neutraliza cualquier estrés; tan pronto desaparece, todo es abstinencia cargada de mal humor; su marcha repentina es la clave central del síndrome pre menstrual (SPM), los tres o cuatro días anteriores al periodo de la mujer.
Referencia: Brizendine, Louann. (2008). El cerebro femenino. Barcelona.